En el pliegue más recóndito de El Comtat, donde la Sierra de la Serrella se funde con el Valle de Seta, Quatretondeta guarda un secreto: sus olivares viejos, retorcidos por el viento y el tiempo, dan un aceite que habla claro. Aquí, entre bancales que trepan por laderas imposibles, el campo no negocia con prisas ni modas.
El aceite de Quatretondeta se hace con Blanqueta y Alfafarenca, variedades que han aprendido a sobrevivir en tierras ásperas. El resultado es un virgen extra con un amargor que muerde al principio y notas a hierba seca y almendra verde, como si alguien hubiera embotellado el alma de estas montañas. Las cooperativas locales, metidas entre casas de piedra, mantienen la extracción en frío pero usando maquinaria que vigila cada grado como un halcón.
Quatretondeta: aceite que nace entre sierras y silencio
«Aquí el olivo no es cultivo, es compañero de viaje», dicen los agricultores mientras recorren los bancales bajo la atalaya de la Serrella. Y se nota: este aceite no busca halagar paladares finos, sino contar la verdad de un territorio donde hasta el silencio sabe a monte bajo.
El Aceite de Oliva de Quatretondeta: Tradición y Sabor
El aceite de oliva de Quatretondeta se caracteriza por su extraordinaria calidad, resultado de una combinación perfecta entre el clima mediterráneo de montaña, los suelos calizos y las técnicas tradicionales de cultivo que se han transmitido de generación en generación.
Los olivares de Quatretondeta, muchos de ellos centenarios, se extienden por laderas y bancales que han sido cuidadosamente trabajados durante siglos. Como bien dice el refrán valenciano: “L’olivera, ben cuidada, sempre ben agraïda” (El olivo, bien cuidado, siempre bien agradecido). Y es que estos agricultores saben que el mimo y la dedicación son fundamentales para obtener un aceite excepcional.
La variedad predominante en la zona es la Blanqueta, que produce un aceite de color verde medio con un frutado intenso y notas a tomate y plátano. Su picante y amargor equilibrado lo convierten en un acompañante perfecto para las ensaladas y pescados.
También encontramos la variedad Alfafarenca, cuyo perfil aromático con toques de manzana y almendra lo hace ideal para pan tostado y carnes a la brasa.
El proceso de elaboración del aceite en esta zona sigue métodos tradicionales pero incorporando tecnología moderna para garantizar la máxima calidad. La extracción en frío es fundamental para preservar todas las propiedades organolépticas y nutricionales del aceite, resultando en un producto de categoría superior.
Oleoturismo en Quatretondeta: Una Experiencia Sensorial
Quatretondeta y el Valle del Seta ofrecen una experiencia única para los amantes del aceite de oliva. Puedes participar en actividades de oleoturismo que te permitirán conocer de primera mano el proceso de elaboración del aceite y disfrutar de catas guiadas bajo olivos monumentales.
Una de las experiencias más destacadas es la ruta por la comarca de la Vall de Seta, donde podrás visitar antiguos olivares y participar en una masterclass sobre cata de aceites locales. Durante esta actividad, aprenderás a diferenciar las calidades del AOVE y sus matices, todo ello maridado con productos locales como almendras, pimientos asados, queso blanco y pan casero.
La zona también cuenta con ruinas romanas y fenicias donde podrás conocer el origen de la fabricación del aceite de oliva en tiempos antiguos, una tradición que se ha mantenido viva hasta nuestros días. El proceso de recolección de las aceitunas sigue siendo un momento crucial en el calendario local, marcando el ritmo de vida de muchas familias.
Estas montañas alicantinas son el escenario perfecto para entender por qué el aceite de Alicante nace en las montañas, donde los bancales de olivos se han adaptado al terreno escarpado, creando un paisaje único que contribuye a la calidad excepcional del aceite.
Torcus: el aceite que te susurra las montañas
¿Has probado alguna vez un aceite que te mire a los ojos y te diga «siéntate, te cuento mi historia»? Ese es Torcus. No lleva el nombre de Quatretondeta tatuado en la botella, pero cada sorbo te teletransporta a esas sierras donde el aire huele a libertad.
Sus olivos son como alpinistas tercos, agarrándose a las laderas del Benicadell, la Serrella, la Mariola o la sierra de Almudaina, desafiando al viento y al sol como si fueran viejos amigos. Y de ahí sale la Alfafarenca, una aceituna con más carácter que un cuentacuentos de pueblo, que solo brota donde la tierra pone a prueba a los valientes.
Lo trabajan como quien pinta un cuadro sin prisas: prensado en frío, dejando que el tiempo se estire como una siesta de verano. Así te llega ese perfume a hierbas salvajes chamuscadas y un cosquilleo en la garganta que no rasca, sino que te acaricia el alma. ¿Antioxidantes? Más que consejos de una abuela. Si quieres flipar con los detalles, pásate por este análisis que lo desmenuza todo. Hasta los aceites de postín se quedan mirando al suelo.
Las aceitunas vienen de olivares que danzan por la comarca, desde Almudaina hasta Planes, sin un mapa fijo, como quien conoce el terreno con los ojos cerrados. ¿Y para qué lo usas? Para darle un vuelco a un guiso de conejo o para que un mendrugo de pan te haga viajar a esas cumbres sin despegar los pies del suelo.
El nombre, Torcus, no es un capricho: viene de torcularia, los antros donde los romanos exprimían aceitunas como si sacaran oro de la tierra. Es un eco de esos días en que el aceite era más que comida, era vida líquida.
No necesita un sello oficial ni te saca un riñón. Es como ese licor que te ofrece un amigo en una jarra sin etiqueta: puro, directo, y con un sabor que te hace preguntar «¿dónde has estado toda mi vida?». Porque con Torcus no compras una marca, compras un pedazo de estas montañas, donde los olivos más curtidos siguen echando raíces como si el reloj no tuviera agujas. 🌿🪨
Qué Hacer en Quatretondeta
Quatretondeta es un destino sorprendente para los amantes de la naturaleza y el turismo rural. Su pequeño casco urbano transmite tranquilidad y te invita a pasear por sus calles empedradas, donde el tiempo parece detenerse.
Lugares de Interés
- La Iglesia Parroquial de Santa Ana: Un templo con encanto construido entre los siglos XVIII y XIX que merece una visita.
- Los “Frares” o Frailes: Estas impresionantes formaciones rocosas en la Sierra de la Serrella se divisan desde el casco urbano y ofrecen unas vistas espectaculares. Se trata de rocas propias del paisaje cárstico que se asemejan a gigantes con túnicas observándote desde la montaña.
- Cova Foradada: Una formación natural a la que puedes llegar siguiendo rutas de senderismo de diferentes niveles de dificultad.
- La Fuente de la Viñeta: Un lugar ideal para terminar una excursión, donde brota un agua fantástica y se ha habilitado una zona de barbacoas, perfecta para visitas en familia.
Rutas de Senderismo
Quatretondeta es un destino genial para amantes de las rutas en la montaña. Puedes elegir entre rutas exigentes o más sencillas, donde encontrarás microrreservas y antiguos neveros. La Sierra de la Serrella ofrece paisajes únicos y una rica variedad botánica, con especies como arces, tejos y el aromático té roquero.
Gastronomía Local
La gastronomía de Quatretondeta está profundamente ligada al aceite de oliva local, que es el ingrediente estrella en muchos de sus platos tradicionales. El Bar Casa Cañares, establecido desde 1946, es el lugar de referencia para probar la auténtica comida de montaña alicantina.
Entre sus especialidades destacan:
- La olleta, un guiso tradicional
- El arroz al horno, uno de los platos más solicitados
- La pericana, elaborada con pimientos secos, bacalao y, por supuesto, aceite de oliva local
- El esgarraet, otro plato típico que combina pimiento asado, bacalao y aceite de oliva
Todos estos platos te permitirán descubrir el verdadero sabor del aceite de oliva de la región, con sus matices y características únicas.
Pueblos Cercanos
Desde Quatretondeta puedes visitar otros encantadores pueblos de El Comtat como:
- Gorga, a apenas 3 km
- Balones, un pequeño municipio con encanto
- Benimassot, donde se encuentra la “olivera de les quatre soques”, un olivo monumental
- Famorca, otro pueblo pintoresco del Valle del Seta
El Aceite de Oliva de Quatretondeta: Un Tesoro por Descubrir
El aceite de oliva de Quatretondeta es mucho más que un producto gastronómico; es el resultado de siglos de tradición, del trabajo duro de sus gentes y de un entorno natural privilegiado. Cada botella cuenta una historia de dedicación y amor por estas montañas alicantinas.
Si quieres experimentar el auténtico sabor del Mediterráneo, no dudes en probar este aceite único.